26 de octubre, 2017 — Si África quiere cumplir con las mínimas normas internacionales en materia de educación y sanidad tendrá que incorporar a 5,6 millones de profesionales en el campo de la salud y 5,8 millones de docentes para el año 2030.
Así lo señala hoy un nuevo estudio del Fondo de la ONU para la Infancia (UNICEF) sobre demografía infantil y sus consecuencias para el continente.
El informe destaca que, según la proyección del crecimiento de la población infantil, el número de menores en África crecerá en 170 millones entre hoy y el año 2030, cifra que supondría alcanzar un total de 750 millones de niños.
UNICEF recordó que en la actualidad casi la mitad de la población del continente africano es menor de 18 años y que las proyecciones demográficas estiman que para el año 2055 el número de niños africanos será de 1.000 millones.
La directora regional de UNICEF para África occidental y central, Marie-Pierre Poirier, afirmó que, “si África aumenta ahora sus inversiones en infancia y juventud, transforma sus sistemas educativos y capacita a las mujeres y las niñas para participar plenamente en la vida comunitaria, laboral y política, podrá obtener beneficios más rápidos, profundos y duraderos de su transición demográfica».
En caso de no realizarse esta financiación, UNICEF destacó que el continente africano podría enfrentarse a un desastre demográfico caracterizado por el desempleo y la inestabilidad