Silvano eclipsó a Poncho (Columna «Bajo la Lupa»)

Intencional o no, el gobernador del estado eclipsó el “informe” del presidente municipal “independiente” ALFONSO MARTÍNEZ ALCAZAR, quien diseñó toda una estrategia mediática y organizacional, para que solo su figura trascendiera no solo en el municipio, sino fuera de él y del estado mismo, incluso a costa de un fuerte disenso con la mayoría del cuerpo edilicio, a quienes el alcalde moreliano minimizó y redujo a un breve, desabrido y humillante evento, en el que PONCHO entregó el “informe” de su segundo año de administración.

La intensa y desde luego carísima campaña mediática, que incluyó un despliegue de “espectaculares” en los que PONCHO “informa” que su administración ha realizado 500 obras, sin aclarar sí en los dos años o solo en el último de la administración municipal y que se supone es la que está informando, así como la celebración de una “magno evento” que contó con la participación de una buena parte de la clase política local y “los cuates” del munícipe moreliano, el gobernador de Nuevo León JAIME “EL BRONCO” RODRIGUEZ, el jefe de gobierno de la ciudad de México MIGUEL ANGEL MANCERA AGUAYO y algunos presidente municipales como el de Querétaro, MARCOS AGUILAR VEGA.

Bueno preguntará usted con razón ¿Y en qué o por qué SILVANO eclipsó a PONCHO? Muy simple. Resulta que en su intervención, el titular del poder ejecutivo sin pena alguna y ante los “invitados de honor” del alcalde moreliano, destacó que: “producto del trabajo de los tres órdenes de gobierno se han logrado aterrizar más de 2 mil 200 millones de pesos en 519 obras y acciones importantes para los habitantes de este municipio” ¡Sopas! ¿Y entonces las 500 obras que con bombo y platillo presume PONCHO?

Sí SILVANO dijo la verdad, entonces PONCHO a más de revelarse como un presidente municipal con altísima proclividad a realizar buenos negocios con el erario, también lo es como mentiroso y frustrado “engaña bobos” y desde luego que será interesante preguntarle al gobernador AUREOLES CONEJO a qué obras se refiere, porque hasta este día, PONCHO MARTÍNEZ le ha regateado a la federación y al estado la paternidad de obra pública o del impulso a varios programas.

Para este escribidor, nada extraño fue que SILVANO AUREOLES CONEJO aprovechara el escenario montado por el propio ALFONSO, para propinarle una bofetada con guante blanco y una lección de política, que se basa en el apotegma de “Dadle a Dios lo que es de Dios y al Cesar lo que es del Cesar”, es decir, que PONCHO en su despliegue mediático no le ha dado el crédito a los apoyos del gobierno del estado o en su caso, al gobierno federal y por lo tanto, SILVANO se lo dijo en un escenario que PONCHO preparó para su lucimiento personal y “El tiro le salió por la culata” al edil, porque el que se lució fue el gobernador AUREOLES.

De la numeralia del multicitado “informe del estado que guarda la administración pública municipal”, ni que comentar, todos son números positivos para el munícipe que de hacerles caso, revelarían a una ciudad maravillosa sin problemas, es más, según esos números que manejó el alcalde, Morelia ya no sería tal, sino “Ponchilandia” o algo parecido, solo que el encanto desapareció, cuando SILVANO dijo que por el apoyo del estado y la federación, se hicieron en Morelia 519 obras, de manera que sí es verdad, -habrá que ver- PONCHO se hizo como el tío Lolo y anda presumiendo con sombrero ajeno.

Por cierto, fuera de la parafernalia organizada por el ayuntamiento con los acarreados al “informe”, para la ciudadanía moreliana dicho “informe” paso de noche y seguramente se dará cuenta de ello con el bombardeo mediático al que será sometido en los próximos días y también habrá que ver la actitud que asumirán los regidores del cabildo moreliano, después de la humillación y desdén con que los trató el alcalde.

La copia de un documento en poder de este escribidor dirigido al presidente municipal ALFONSO MARTÍNEZ, es un texto en donde le denuncian que la selección de los integrantes del llamado “Cabildo Juvenil” lo fue mediante un “acuerdo político” entre los integrantes del cabildo de Morelia y no como se estableció en las reglas de la convocatoria expedida exprofeso, circunstancia que fue reconocida pro el encargado del despacho del Instituto de la Juventud Moreliana JUAN PABLO MOTILLA ZARUR.

En su denuncia, que firman varios jóvenes inconformes, señalan que no solo se violaron las reglas para la integración del “cabildo juvenil” sino que se dio preferencia a jóvenes del Partido Acción Nacional, lo que no solo le dio origen ilegal al proceso, sino que los integrantes del cabildo municipal partidizaron dicho evento, de ahí su inconformidad y solicitan que se anule el procedimiento y se repita respetando las reglas.

Dice mi amigo JUAN MANUEL BELMONTE que las patologías se juntan y no tengo duda de lo que afirma, pues en esta ocasión las patologías de la COCOA CALDRÓN y la de PONCHO MARTÍNEZ se volvieron a juntar, pues al segundo le falló la estrategia en su segundo informe de gobierno municipal y a la señora CALDERÓN le infringieron un colosal derrota en el proceso interno panista para elegir al dirigente juvenil del PAN en el municipio de Morelia.

Resulta que LA COCOA CALDERÓN impulsó a su primogénito ESTABAN CALDERÓN HINOJOSA a que participara en el proceso electivo del dirigente juvenil del Comité Municipal de Morelia del Partido Acción Nacional y bueno, pues la primera experiencia electoral del vástago de LUISA MARÍA CALDERÓN, fue desastrosa, pues fue derrotado en la elección estrepitosamente 2 a 1 por su adversario, un joven hijo de taxista de nombre ÓSCAR OSUNA LUVIANO, quien obtuvo 63 votos, por 34 que logró el hijo de la senadora CALDERÓN HINOJOSA.

Aunque la familia CALDERÓN acompañó en todo momento al joven ESTEBAN, de nada sirvió dicho apoyo, pues fue derrotado como ya se dijo, estrepitosamente al 2 por 1 y en opinión de este escribidor, la derrota del joven CALDERÓN tiene como lectura, que el poder o la hegemonía que la Familia CALDERÓN ejercía sobre el panismo moreliano ha desaparecido y que la posible intentona de la senadora LUISA MARÍA de volver a ser candidata a la presidencia municipal de Morelia, ya lo fue en 1986, se verá frustrada por la decadencia política de su familia, la que ya no logra siquiera ganar una elección interna en su partido.