El crepúsculo de Alfonso Martínez Alcázar (Columna «Bajo la Lupa»)

En la última entrega me permití afirmar que cada día que transcurre, brotan más pústulas en la administración municipal que encabeza, tranzas, trinquetes, cochupos y moches surgen por doquier, solo es cuestión de hurgarle tantito en los intestinos de dicha administración, pero no solo eso, sino que es evidente que todo aquello que no le produce dividendos económicos, no lo atiende, omisiones que le cuestan o pueden costarle muy caro a los morelianos.

El último escándalo de corrupción que ha salido a la luz pública, es la firma de un contrato de “Arrendamiento Puro” por 28 meses de 100 vehículos de diferentes tipos y marcas, modelos 2016 y 2017, con la empresa denominada “TURBOFIN S.A.P.I. DE C.V.”, siendo 56 vehículos de trabajo Pick Up, 1 RAM Sport, 4 Silverado, 33 Aveo Austeros, 1 Cruze de Lujo, 2 SUV sequía Limited (De súper lujo) y 1 Van de Pasajeros, para un total de 100 unidades en arrendamiento puro.

De acuerdo a lo que se puede leer en el contrato respectivo, éste fue firmado el 02 de Enero del 2017 por el secretario de administración YANKEL BENITEZ SILVA y el director de compras, almacén y mantenimiento del municipios de Morelia LUIS EDUARDO JURADO GUERRERO, ambos en representación del ayuntamiento de Morelia y por su parte el señor DIEGO GASPAR VILLARIAS representante legal de la empresa TURBOFIN S.A.P.I. DE C.V.

El “Arrendamiento Puro” realizado por los funcionarios municipales citados, implicó para el municipio de Morelia, erogar de su presupuesto anual la cantidad de $5 millones,458 mil,276.00 pesos como anticipo y a pagar una mensualidad de $1 millón, 585 mil, 929.13 pesos, para un total de $49 millones, 864mil, 291.70 pesos por los 28 meses de dicho arrendamiento.

El 1 de Abril del 2016, los mismos personajes representantes del ayuntamiento y la citada empresa, firmaron un primer contrato mediante la figura del “Arrendamiento Puro” de 100 unidades para el servicio municipal, cuyo costo fue de $20 millones, 942 mil, 393.34 pesos durante 9 meses, es decir de 1 de abril al 31 de diciembre del 2016, es decir, el municipio pagó una renta mensual de los 100 vehículos de $2 millones, 326 mil, 932.59 pesos, contrato que se renovó el pasado 02 de Enero del 2017, en los términos ya descritos.

Actualmente existen dos tipos de arrendamiento que podrían sernos útiles para adquirir el auto que requerimos. Estos son el arrendamiento puro y el arrendamiento financiero. El arrendamiento puro consiste en pagar renta por utilizar determinado vehículo durante el tiempo que utilicemos el mismo. Por otro lado el arrendamiento financiero funciona de manera similar con la diferencia de que éste contiene una opción de compra al finalizar el plazo determinado. La opción de compra consiste en pagar el valor residual del activo y de esta manera adquirir la propiedad del mismo.

Expertos consultados por este escribidor, señalan con mucho énfasis que la figura del “Arrendamiento Puro” es utilizada principalmente por empresas productivas que tienen grandes obligaciones fiscales, de manera que el vehículo o vehículos al servicio de estas empresas mediante esa figura, permite “deducir” de impuestos el importe de la “renta”, de ahí que estos mismos experto me confíen que la utilización de esta figura por un gobierno o institución paraestatal, es una aberración, porque la figura del “Arrendamiento Puro”, es una renta demasiado cara, sobre todo, porque en este caso que nos ocupa, el municipio no tiene utilidades, no paga el ISR y por lo tanto no puede “deducir” el costo de dichas rentas.

Sí bien es cierto que el dinero de cualquier forma tiene un costo, el costo del dinero va diluido en el precio de venta del vehículo, de manera que acudir a cualquier agencia automotriz para adquirir 100 unidades o bien, las que sean según las necesidades, con seguridad que se les vende en esos 24 mese “sin intereses”, circunstancia que arroja la pregunta: ¿Por qué el municipio no optó por esta alternativa, a sabiendas de que saldría mucho más barato a las finanzas municipales?

Las consideraciones anteriores son las que los inducen a pensar, que el presidente municipal de Morelia ALFONSO MARTÍNEZ ALCÁZAR y su equipo de trabajo son unos verdaderos ignorantes e incapaces como para realizar un “contrato” tan leonino y desventajosos para el municipio o bien, diseñaron esta forma de tener vehículos nuevos y a la vez hacer un negocio que les rindiera grandes ganancias. ¿Usted qué cree?

Es claro que las aspiraciones del actual presidente municipal ALFOSNO MARTÍNEZ de participar en el proceso electoral del 2018 para reelegirse, han disminuido considerablemente, al extremo que para este escribidor, el edil moreliano apenas alcanzaría un 20% de posibilidades de lograr el triunfo electoral, pues la suma de yerros en la administración municipal son muchos, pero siquiera solo fuera el hecho de errar, que de alguna manera justificaría la sociedad, pero en el caso, se trata no de yerros, sino de acciones que evidencian un intenso tufo a corrupción.

En apoyo a lo anterior, baste recordar la intentona por imponer a los morelianos la famosas “Fotomultas”, cuya intencionalidad más que incidir en la seguridad de los morelianos, tenía más de medida recaudatoria y de un buen negocio que demostrado quedó, produciría grandes ganancias para el bolsillo del edil.

Igual se percibe con el “Proyecto de Renovación del Alumbrado Público de Morelia”, el cual mediante la utilización de la figura de la “Asociación Pública Privada” pretende pagar de “renta” por las 67 mil luminarias que serían reemplazadas por la empresa, la friolera de 14 millones de pesos mensuales, durante los próximos 10 años, para un total de 1680 millones de pesos.

No cabe la menor duda, el futuro político del presidente municipal “independiente” DON ALFONSO MARTÍNEZ ALCÁZAR y toda su pandilla, es muy negro, casi me atrevo a decir que ya no tiene futuro, empero, decía el piporro: “With money dance the dog”, con dinero baila el perro y después de ver cómo ha transcurrido la administración municipal, lo menos que le va a faltar a PONCHO MARTÍNEZ en caso de que se postule para alcalde una vez más, será dinero.

Una de las grandes obsesiones que se le observan al actual secretario de seguridad pública del estado JUAN BERNARDO COTONA MARTÍNEZ, es impedir a costa de lo que sea, que salgan a la luz pública las balandronadas de los elementos y funcionarios de esa secretaría, sin embargo existen empleados y trabajadores de esa dependencia que no están de acuerdo con la manera de administrar esa secretaría y hacen esfuerzos por denunciar el acontecer de la institución en ese sentido.

Pues resulta que el Coordinador Regional en Lázaro Cárdenas de la Secretaría de seguridad Pública, es una persona insatisfecha en sus instintos sexuales, pero más insatisfecho de que las mujeres no le hagan caso o como se dice coloquialmente, las mujeres “no lo pelan” y opta por recurrir a sus subordinadas a quien obliga a tener relaciones sexuales, so pena de “hacer lo necesario” para que la elemento policiaca que no se preste a sus instintos sexuales frustrados, sea dada de baja, si no es que les fabrica delitos y las consigna ante el ministerio público.

Así las cosas, una elemento policiaca –cuyo nombre no daremos por obvias razones- adscrita a la región Lázaro Cárdenas, presentó formal denuncia ante la unidad de asuntos internos de la Secretaría de Seguridad Pública en contra del citado Coordinador Regional de esa secretaría, al que acusó de haberla obligado a tener relaciones sexuales so pena de promover su baja de la corporación.

No conforme de haberla violado en una ocasión, el coordinador policiaco pretendió que una vez más sostuvieran un encuentro sexual, solo que esta vez, la mujer policía contó con el apoyo de su novio, quien por supuesto la apoyó y no permitió el abuso del jefe policiaco, empero, enojado el desairado sexual, arremetió en contra del novio de la presunta víctima, al extremo de fabricarle delitos del orden federal, particularmente por narcotráfico, procediendo a consignarlo ante el ministerio público.

En este asunto, la víctima, es decir la mujer policía, al observar las actuaciones de la unidad de asuntos internos de la secretaría de seguridad pública, ha optado por proceder a denunciar ante el agente del ministerio público a su jefe y coordinador policiaco en el puerto, sin embargo, resulta que la agraviada y víctima está sufriendo presiones “de muy arriba”, para obligarla a desistir de hacer su acusación penal ante el MP, bajo la respectiva y conocida amenaza de darla de baja de la corporación y si insiste en hacer la denuncia, fabricarle delitos del orden federal al igual que a su novio.

No es la primera vez que al interior de la secretaría de seguridad pública estatal se utilizan los métodos de la intimidación, las amenazas o la fabricación de delitos en contra de elementos policiacos, que tratan de denunciar irregularidades o ilegalidades de los mandos o de funcionarios de esa secretaría y no se necesita ser mago ni brujo, para inferir que para que esto suceda, necesariamente se cuenta con la autorización y beneplácito del secretario CORONA MARTÍNEZ, máxime que ahora JUAN BERNARDO se considera el “operador político” preferido del gobernador SILVANO AUREOLES CONEJO.

Como observador político, claro a la medida de mis posibilidades, me he podido percatar de la presencia de funcionarios públicos, sobre todo de la federación, que están haciendo acto de presencia en la XXII Asamblea Nacional del Partido Revolucionario Institucional, en la etapa de desarrollo de la “Mesas Temáticas” y me pregunto: ¿Los funcionarios federales en Michoacán que asisten a los trabajos de la XXII Asamblea Nacional del PRI, solicitarían el permiso correspondiente y sin goce de sueldo? Entre los observados estaba el delegado federal de SEDESOL GERÓNIMO COLOR