03 de abril, 2017 — Apoyar al sector agrícola en Siria podría ser la clave para reducir drásticamente la necesidad de ayuda humanitaria y el éxodo rural en ese país, advirtió un nuevo estudio de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO).
El informe presentando en Bruselas, presenta la primera evaluación integral del costo de la guerra para el sector agrícola en Siria y señala que a pesar de la enorme destrucción, la inversión en la agricultura podría hacer la diferencia a nivel humanitario y migratorio.
“La situación es seria, pero la agricultura continúa siendo el medio de subsistencia de 6,7 millones de sirios que viven en áreas rurales. El 94% de las personas que participaron la evaluación asegura que la inversión en la agricultura tendría un impacto positivo que las haría quedarse en su tierra y también haría que otros regresaran”, declaró Neil Marsland, Oficial Técnico de la FAO en Roma.
El estudio incluye encuestas a más de 3.500 hogares en Siria, entrevistas con 380 grupos comunitarios y análisis de datos agrícolas. Según la mayoría de los campesinos sirios entrevistados, el aporte básico de semillas, fertilizantes y combustible para los sistemas de riego, reduciría el número de personas que abandonan las zonas rurales.
El conflicto en Siria ha causado 16.000 millones de dólares en pérdidas de cultivos y producción ganadera. El 75% de los hogares en zonas rurales aún viven de cultivar para su propio consumo.
”Hay grandes desafíos pero eso no debería detenernos para invertir ahora mismo. Hacerlo en las zonas donde es apropiado podría hacer la diferencia”, agregó Marsland.
El costo inicial de la reconstrucción del sector agrícola se estima entre 10.700 y 17.100 millones de dólares en un plazo de tres años, dependiendo de que haya una solución definitiva al conflicto en Siria.