Columna «Sendero Político», Por José Cruz Delgado (09-I-17).- Sin duda alguna que los políticos más influyentes en Michoacán son el presidente estatal del Partido Revolucionario Institucional y el gobernador perredista Silvano Aureoles Conejo. Ambos gozan de simpatías no sólo en el estado sino a nivel nacional.
Silvano, “El Gallo de Michoacán”, llegó al gobierno del estado con el respaldo de la mayor parte de los michoacanos luego de que el PRI postulara un candidato endeble y muy cuestionado pues no gozaba de las simpatías de los priístas y por la manera no muy ortodoxa en que logró la candidatura y finalmente Chon Orihuela perdió la elección al no contar con el respaldo total de las bases que le dieron la espalda.
A poco más de un año y tres meses de gobernar Michoacán, pese a las dificultades políticas y económicas, Aureoles Conejo ha logrado conciliar a las tribus al interior de su partido, el Partido de la Revolución Democrática y se ha consolidado como un fuerte aspirante a la candidatura a la Presidencia de la República.
Silvano tomó las riendas de Michoacán con muchos problemas, principalmente el de a inseguridad y ha tenido que enfrentar críticas fuertes porque aún no ha logrado pacificar al estado como lo prometió al rendir protesta como gobernador.
Sin embargo, pese a todo, ha logrado, con el apoyo de la gente disminuir un poco la incidencia delictiva aunque para muchos hace falta mucho por hacer en ese rubro. Lo que es en la Tierra Caliente disminuyó la criminalidad tras asestar duros golpes al crimen organizado con la captura de presuntos cabecillas y la gente ha logrado un poco de tranquilidad y de nuevo reactivaron sus labores cotidianas en el campo sin temor.
Pero lamentablemente creció la delincuencia y la inseguridad en la zona de Zamora y El Bajío Michoacano. En esos lugares se ha incrementado la vigilancia con los límites con el estado de Jalisco por tatos hechos violentos que están afectando la tranquilidad de sus habitantes y, sobre todo la economía. Silvano hace lo que puede, pero para los michoacanos y actores políticos, hace falta una reestructuración en la Procuraduría General de Justicia, empezando por el relevo del procurador José Martín Godoy Castro.
Silvano cuenta en su gabinete con una mujer muy importante e influyente, Julieta López Bautista, su coordinadora de Comunicación Social que ha logrado proyectar una imagen positiva del actual mandatario estatal a nivel nacional.
Silva Tejeda
Para Víctor Silva Tejeda el panorama político es muy diferente, pues su trabajo ha sido unificar a los priístas inconformes que en su momento le dieron la espalda a Chon Orihuela, quien por cierto, tras ser derrotado poco aparece en el escenario político, y hace bien porque su presencia es factor de división.
Mucho tuvo que ver la imposición del ex presidente del tricolor Agustín Trujillo Íñiguez quien fue impuesto por Chon Orihuela. Por cierto, Trujillo Íñiguez dejó un partido dividido y si se hubiera quedado un poco más en la dirigencia lo hubiera desaparecido y por si fuera poco, a finales del año pasado el tricolor fue multado con diez millones de pesos y a la fecha en nefasto ex dirigente no ha sido llamado a cuentas.
Bueno, pues un año y días de haber asumido Silva Tejeda la presidencia del tricolor en Michoacán, el panorama sufrió un cambio total.
Silva tuvo que iniciar una total reestructuración e inició una cruzada para unificar a los priístas logrando el respeto y respaldo total de la militancia y el número de simpatizantes aumentó considerablemente, pues es considero un político serio y conciliador lo que le ha servido para ganarse la confianza de la dirigente nacional que encabeza Enrique Ochoa Reza.
Para lograr esa unificación se ha reunido y se sigue reuniendo con los Consejos Políticos Municipales y los Comités locales y ha recorrido el estado buscando el diálogo con las dirigencias, con las bases y los simpatizantes, incluso, ha logrado ganarse las simpatías de militantes de otros partidos políticos, de las y los jóvenes, de las mujeres y de la gente adulta que durante toda su vida han sido priístas pero que se sintieron defraudados por la imposición de Chon Orihuela y optaron por otra opción. Hoy están de vuelta a su partido porque confían en Víctor Silva Tejeda.
Incluso, aquellos que no militan o simpatizan con un partido político, hoy se están acercando al PRI bajo las riendas de Silva.
Así, ambos personajes, Silva y Silvano se han convertido en los políticos más influyentes y reconocidos por su capacidad política, cada uno en sus diferentes tareas.