08 de diciembre, 2016 — Millones de niñas y niños forman parte de los números sin precedentes de personas que huyen de sus hogares debido a guerras, conflictos y persecución.
Protegerlos y encontrar soluciones a los enormes riesgos que afrontan es tema de un foro de dos días que se celebra en Ginebra, denominado “Niños en Movimiento, organizado por la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR).
En su discurso de apertura del encuentro, el Alto Comisionado de ese organismo, Filippo Grandi citó algunos de los riesgos a los que están expuestos, especialmente si hacen ese viaje solos, sin acompañamiento, o bien si terminan separados de sus familiares.
“Están expuestos a contrabandistas y tratantes de personas. El hecho de que la mayoría de las veces no tienen protección, incluso de las personas que viajan con ellos, los expone a todo tipo de explotación. No podemos aceptar esto. Necesitamos luchar contra ello, encontrar formas de abordar esta situación”, dijo el Alto Comisionado.
Grandi explicó que los niños constituyen el 51% de los más de 21 millones de refugiados en el mundo. Muchos de los que están en movimiento acaban en centro de detención que resulta en un grave impacto negativo en su salud mental y física y su desarrollo a largo plazo.