16 de noviembre, 2016 — Conscientes de su vulnerabilidad al impacto del cambio climático, los países de la región del norte de África y de Oriente Medio han comenzado a emprender acciones para hacer frente al fenómeno.
Varios de ellos presentaron este miércoles sus iniciativas en la Conferencia de la ONU sobre la cuestión (COP22), que se celebra en Marrakech, Marruecos, hasta el 18 de noviembre.
La agricultura en estas regiones es particularmente vulnerable a los cambios de temperatura y precipitación. El calentamiento global es más pronunciado en estas zonas, lo que ocasiona sequías más frecuentes y severas, explicó la ONU.
Por ejemplo, la sequía de 2015 en Marruecos destruyó más de la mitad de la cosecha de trigo y provocó una caída del 1,5% en el Producto Interior Bruto del país.
El Banco Mundial anunció un nuevo plan para apoyar a los países de ambas regiones, que duplica el financiamiento dedicado a la acción del clima y alcanza 1.500 millones de dólares al año hasta 2020.
El plan se centra en cuatro prioridades: seguridad alimentaria y agua; ciudades sostenibles adaptadas a las nuevas condiciones climáticas; transición hacia las energía bajas en carbono; y protección de los más pobres expuestos a los impactos del cambio climático.