06 de julio, 2016 — El Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos repudió el ataque suicida cometido el lunes cerca de la Mezquita del Profeta, en la ciudad de Medina, en Arabia Saudita, y lo calificó como un ataque a la religión mahometana.
Zeid Ra’ad Al Hussein recordó que esa mezquita es uno de los sitios más sagrados del Islam, por lo que la agresión, ocurrida en pleno Ramadán, puede considerarse un atentado directo contra todos los musulmanes del mundo.
El Secretario General de la ONU, Ban Ki-moon, se sumó a la condena y pidió que identifique y procese a los responsables de tan atroz crimen.
Asimismo, subrayó la necesidad de fortalecer las provisiones regionales e internacionales contra el terrorismo.
El ataque en Medina causó la muerte de al menos cuatro policías e hirió a cinco más y hasta el momento nadie se ha adjudicado su autoría.
Según las informaciones, el suicida que llevó a cabo ese embate se inmoló antes de entrar a la mezquita porque fue interceptado por agentes de seguridad que lo consideraron sospechoso cuando cruzaba un estacionamiento en camino a ese centro de oración.
El atentado en Medina fue uno de los tres registrados el lunes en Arabia Saudita. Loss otros dos, también cometidos por suicidas, tuvieron lugar en las localidades de Qatif y Jeddah, en las proximidades de una mezquita y del consulado de Estados Unidos, respectivamente.