19 de mayo del 2016.- Hay algunos días en los que simplemente no puedes dejar de bostezar, sin importar qué tan bien hayas dormido. Pero, ¿sabías que una taza de café no podría ser la mejor solución? Claro, podrías terminar un poco energizada, pero la sensación es tan solo temporal y no dura lo suficiente.
¿No prefieres una solución más confiable? La respuesta está al alcance de tu cocina.
Avena: Resulta que un tazón de avena podría ser uno de los mejores desayunos del mundo. Además de brindar un montón de energía, también se quema lentamente, así que no causa un bajón de energía después un rato como lo hacen las bebidas endulzadas.
Agua: Así de simple: agua natural. Incluso la más leve deshidratación podría hacerte sentir cansada y con poca energía… lo cual sucede seguido durante las mañanas. Para evitar que esto suceda, es importante tomar un vaso de agua después de despertarse y uno antes de dormir. Fácil, ¿no?
Semillas de chía: Las semillas de chía tienen ácidos grasos de Omega 3, los cuales luchan en contra de la fatiga y te ponen más alerta. Pero los beneficios no se detienen ahí: esas pequeñas semillas pueden absorber el peso de agua 10 veces más de lo normal, lo cual acelera el proceso de digestión mientras te mantiene hidratada y despierta.
Verduras de hoja verde: Comer vegetales de hoja verde no sólo es bueno para tu peso, sino también para tus niveles de energía. Contienen mucha vitamina B, la cual puede convertirse en energía. Si despiertas súper cansada, nuestra recomendación es que te hagas un smoothie verde. Será algo tardado, pero te aseguro que no te arrepentirás.
Huevos: Seguro has escuchado o leído que los huevos son malos para ti, pero eso no es verdad. De hecho, son tu mejor opción para un desayuno saludable y energizante. Y, ¿por qué? Porque la yema del huevo tiene mucha proteína, y no hay nada mejor para tener energía, que la proteína misma.
Con datos de El Informador.mx