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Columna «Sendero Político», Por José Cruz Delgado.- Sigo insistiendo en el tema de la desbandada de diputados al interior de la bancada del PRI, porque es una cosa muy seria y lamentable, pues hay que recordar que nuestros legisladores son los encargados de hacer, derogar y modificar leyes, siempre y cuando beneficien a los michoacanos. Además, a los michoacanos les sale muy costoso mantener a los 40 legisladores, así que más les vale ponerse a trabajar y dejar de lado los intereses particulares y de grupo por el bien de Michoacán. Los tambores de guerra siguen sonando al interior de la bancada priísta.
La coordinadora de la fracción parlamentaria del (PRI), Adriana Hernández Íñiguez minimiza la desbandada y pidió a los medios de comunicación cerrar este capítulo, como si no pasada nada y asegura que a ella los diputados rebeldes nada le han dicho sobre la separación de su bancada, a lo mejor quiere que cada uno de los siete legisladores inconformes se lo hagan por escrito, al buen entendedor pocas palabras. ¿No? Pero parece que se hace la occisa y quiere hacer ver a los michoacanos que todo está bien, pero de todos es sabido que andan de la greña y al paso que van se van a quedar sin cabellera. La legisladora debe hablar con los rebeldes y llegar a acuerdos consensuados y hacer de lado su soberbia, porque de no ser así, el único ganador de esta división interna será el gobernador Silvano. Los legisladores de las otras bancadas están que se mueren de la risa por el show que están protagonizando los tricolores.
Por cierto, Hernández Íñiguez volvió a negar que tenga conocimiento de la separación de los siete diputados de su bancada y agregó tajante: “Mientras no haya una separación formal, yo les pido que ya toquemos otro tema, porque ya es muchos días de lo mismo, no hay nada formal, entonces más bien seguiremos nosotros trabajando, seguiremos con nuestra agenda legislativa que es muy nutrida y muy fuerte y que es lo que realmente les importa a los michoacanos”. ¿De verdad trabaja para los michoacanos? o para un grupo en particular, todo indica que es lo último, los michoacanos son lo de menos.
Pero entra en contradicciones, pues mientras niega ruptura, señala que el tema se está tratando en la dirigencia estatal del PRI y no a través de la nacional y espera que Víctor Silva Tejeda, continúe siendo un buen mediador en los conflictos que están atravesando. Pues no que no hay conflicto, en qué quedamos, está como la Chimultrufia, dice una cosa y luego dice otra. Lo cierto es que le falta criterio y capacidad para manejar este asunto.
Mientras tanto, sigue la guerra de declaracionesContinúa la guerra de declaraciones toda vez que el presidente de la Mesa Directiva del Congreso Estatal, Raymundo Arreola Ortega, acusó a la Coordinadora del grupo, Adriana Hernández Íñiguez, de enviar al diputado Sergio Ochoa Vázquez, a golpearlo políticamente al acusarlo de buscar imponer a su hijo como titular del Tribunal de Justicia Administrativa (TEEM). ¿Y no?
El legislador del tricolor, quien forma parte del grupo liderado por Adriana Hernández Íñiguez, aseguró que uno de los conflictos internos de la bancada priísta se debe a que Arreola quiere que uno de sus hijos sea nombrado por este poder como magistrado en la instancia señalada y no Consuelo Muro Urista, propuesta de Hernández Iñiguez.
Entrevistados por separado, Arreola Ortega opinó que estas acciones ahondan las diferencias entre los legisladores del Tricolor, por lo que hizo un llamado a la reconciliación, con el propósito de reforzar los trabajos incluidos en la agenda legislativa del Revolucionario.
Ochoa Vázquez comentó que respaldará la coordinación encabezada por Hernández Íñiguez, debido a que su trabajo sí ha sido hecho bajo consenso, contrariamente a lo declarado en días pasados por otros legisladores priístas, como es el caso del ex edil capitalino, Wilfrido Lázaro Medina.
Por cierto, alguien le preguntó que si renunciaría como coordinadora de su bancada, lógicamente y como era de esperarse dijo que no. Ni modo que dijera que sí. ¿Verdad?
