23 de febrero, 2016 — El Secretario General de la ONU condenó los atentados cometidos el domingo en las ciudades sirias de Damasco y Homs, y reivindicados por el ISIS o Daesh.
Según las informaciones de monitores locales de derechos humanos, los ataques terroristas causaron la muerte de al menos 155 personas, la mayoría civiles.
Ban Ki-moon ofreció sus condolencias a las familias de las víctimas y señaló que los responsables de tan atroces y deliberados actos deben responder ante la justicia.
Los ataques en ambas ciudades, seis en total, tuvieron lugar en zonas de población principalmente chiíta. Algunos fueron perpetrados con coches bomba y otros fueron obra de suicidas con cinturones explosivos.