20 de enero, 2016 — Una nueva evaluación del Programa Mundial de Alimentos (PMA) y sus socios reveló que la mitad de la población de la República Centroafricana, unos 2,5 millones de personas, se enfrentan al hambre.
La cifra duplica el número de personas hambrientas respecto a la misma fecha hace un año,un alto precio para la población del país africano donde sigue reinando la inseguridad, limitando el acceso y la disponibilidad de los alimentos.
La investigación revela que cada uno de cada seis mujeres, hombres y niños sufre inseguridad alimentaria fuerte o extrema, mientras que uno de cada tres, sufre inseguridad alimentaria moderada e incerteza sobre cuándo podrán volver a comer.
El Director adjunto del PMA en la República Centroafricana, Guy Adoua, señaló que los tres años de crisis han supuesto un duro golpe para la población de ese país: las familias han sido forzadas a vender sus pertenencias, sacar a los niños de la escuela y recurrir a la mendicidad “Estas personas se han quedado sin nada”, remarcó Adoua.
El informe señaló que la cosecha de la temporada 2014-2015 fue pobre y que los precios de los alimentos continúan siendo altos.
Los agricultores no pudieron mantener sus campos debido a la inseguridad en el país y cientos de miles de ellos fueron forzados a huir de sus casas con el consiguiente abandono de sus tierras.
El programa de la ONU necesita 41 millones de dólares para responder de aquí al final de junio a las necesidades urgentes en ese país y países vecinos que acogen a refugiados de este país.
Durante el mes de diciembre, el PMA proporcionó comida a cerca de 400.000 personas y continúa proveyendo alimentos a los más vulnerables.