Por Armando Saavedra (21-10-15)
ALFONSO, INEXPERIENCIA O MALA FE
Cada día que pasa me asalta la preocupación, de que la aventura e ilusiones de los morelianos en haber elegido a un candidato independiente como Presidente Municipal, pueda terminar en una decepción y un primigenio arrepentimiento, pues resulta, que ya está siendo cotidiano que el “bronquito” moreliano ALFONSO MARTÍNEZ ÁLCAZAR diga de su ronco pecho, discursos que se convierten en evidentes incoherencias, que al parecer se derivan de una evidente falta de experiencia administrativa y conocimiento de las leyes y la normatividad que rige los procedimientos municipales. Este lunes 19, el edil capitalino señaló que la administración de SALVADOR ABUD MIRABENT, dejó obras planeadas sin presupuesto y agregó que existen 90 obras en la capital michoacana sin sustento económico y advirtió: “Dejaron obras planeadas, pero no con presupuesto. Se dejó una meta muy alta para recaudación que no se pudo cumplir en todo el año, y además pues no se calculó la deuda, que vienen arrastrando de varios años. Lo que hacen es que como no alcanza el presupuesto, lanzan algunos pagos para los siguientes años. Y terminó diciendo que dichas obras, al no contar con el soporte presupuestario necesario para su ejecución, se quedarán en la congeladora”.
EDIL IGNORANTE
Las declaraciones públicas de ALFONSO MARTÍNEZ ÁLCAZAR, ponen en claro y evidencian la falta de experiencia en materia administrativa y gobernanza del munícipe moreliano, también evidencia que su gabinete ciudadano padece de lo mismo, pues de lo contrario ya le hubieran advertido que los planes anuales de inversión (PAI), se aprueban por el cabildo mediante un dictamen donde se detallan las obras a ejecutar y el origen de los recursos, a través de los cuales se costearán dichas obras. No se pueden incluir obras en el PAI, sin un sustento financiero, independientemente del origen de los recursos que pueden ser propios o de procedencia federal o estatal, estos últimos, -estatales y federales- definidos en convenios con los respectivos gobiernos, el estado o la federación y el ayuntamiento.
GOBIERNOS INCUMPLIDOS
En este tenor no solo en Morelia, sino en los más de 2 mil municipios del país, frecuentemente se da el fenómeno de que los ayuntamientos convienen obras con sus respectivos gobiernos de los Estados y con las dependencias de la Federación, empero, tanto los gobiernos de los Estados como la misma Federación incumplen con la aportación de tales recursos o dilatan su suministro que hacen imposible la ejecución de dichas obras. En el caso del no cumplimiento por parte del gobierno Estatal o Federal, la consecuencia inmediata es la cancelación de las obras programadas en base a ese financiamiento, de igual manera debe promoverse una modificación al Programa Anual de Inversión, para que el cabildo dictamen de por medio, apruebe dicha modificación.
90 OBRAS CANCELADAS
En su periplo de verborrea, el “Bronquito” moreliano, informó a la ciudadanía a través de los medios de comunicación de su preferencia, que sus antecesores habían programado la ejecución de 90 obras sin sustento presupuestario y atribuyó la cancelación de dichas obras, según él, porque la Administración anterior había calculado mayores ingresos, es decir, el Congreso del Estado le aprobó al Ayuntamiento de Morelia un presupuesto deficitario de tal magnitud, que según MARTÍNEZ ÁLCAZAR, afectará 90 obras públicas, al anterior argumento PONCHO MARTÍNEZ dijo también, que la inejecución de esas 90 obras, también se debía a que la Administración anterior no consideró el pago de la deuda pública y el servicio de la misma, circunstancia que también repercutió en la inejecución de las multicitadas obras.
JARA NO CUMPLIÓ Y SILVANO…
Nada más falso que lo afirmado por ALFONSO MARTÍNEZ, pues con solo consultar el Programa Anual de Inversión aprobado por el Cabildo moreliano en este 2015, se advierte sin lugar a dudas, que la totalidad de obras programadas tienen sustento financiero, pero además en ese documento se advierte el origen de los recursos y con un poco de conocimiento en finanzas públicas, podemos concluir que más del 80% de la obra pública que ejecuta el Ayuntamiento de Morelia, la ejecuta con recursos económicos procedentes de los gobiernos estatal y federal. Cómo no recordar que a mediados del mes de marzo del presente año, el entonces gobernador SALVADOR JARA GUERRERO, en un pomposo evento realizado en el CEDEMUN (Centro Estatal de Desarrollo Municipal) y con la presencia de la mayoría de los 112 Presidentes Municipales del Estado, anunció algunos cientos de millones de pesos del erario estatal destinados para obras y servicios para los ayuntamientos, con la algarabía y beneplácito de los entonces Alcaldes en funciones. SALVADOR JARA arrancó porras y aplausos de los presentes, generando alegría en los munícipes, misma que pronto se desvaneció, al ver que lo anunciado y prometido por JARA GUERRERO, se cumplió en tan solo la primera ministración de esos recursos. Al municipio de Morelia, SALVADOR JARA GUERRERO le prometió, convenio de por medio, 52 millones de pesos de los que hasta la fecha el gobierno del Estado solo ha proporcionado 16 millones.
NO HAY DINERO, NO HAY OBRAS
Como ya se señaló, en marzo SALVADOR JARA convino con el municipio de Morelia, la aportación de 52 millones de pesos para obra pública, en consecuencia, la autoridad municipal encontró en esos recursos, el soporte financiero para incluir en el PAI gran parte de las 90 obras que señala el “Bronquito moreliano”. En el caso que nos ocupa, también existen algunas obras producto de convenios federales cuyos recursos son canalizados a través de la Secretaría de Finanzas del Gobierno Estatal, dependencia que no ha entregado dichos recursos a los Ayuntamientos. Así las cosas, es de elemental obviedad, que si no hay dinero, no hay obras y la responsabilidad recae en la autoridad que ha escamoteado los recursos.
LAMENTOS SIN TRABAJO
La flexibilidad de los planes de inversión en los municipios, es una práctica normal que responde a la disponibilidad de los recursos propios, estatales y federales, sin embargo, seguramente ALFONSO MARTÍNEZ asesorado por su gabinete ciudadano, no se ha dado cuenta de ello y solo atina a hacer lo que el librito del mal político dice: echarle la culpa a su antecesor, pues si tuviera experiencia administrativa, el “Bronquito Martínez” en lugar de tirar palabras al viento culpando a su antecesor, debería tener los pantalones bien puestos y reclamar al gobierno del Estado que le entregue los recursos comprometidos, para poder cumplir a cabalidad con el Programa Anual de Inversión aprobado por el Cabildo. No hemos visto a PONCHO MARTÍNEZ trabajar, sino solo se ha dedicado a quejarse, ahora, se lamenta hasta de lo que le toca resolver a él mismo. Por lo menos, debiera imitar a SILVANO AUREOLES quien hasta le fecha no se ha quejado de sus antecesores, sino que ha enfrentado los problemas y busca como resolverlos. ¿Tendrá ALFONSO MARTÍNEZ los pantalones suficientes, para reclamar a SILVANO AUREOLES los recursos convenidos no entregados al municipio de Morelia? Lo dudamos y si no al tiempo.