04 de septiembre, 2015 — El sur de Europa necesita nuevos y grandes centros de procesamiento de asilo político para responder a la crisis de refugiados en el continente, dijo hoy el titular de la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR).
El llamamiento de Antonio Guterres se produjo en un momento en que el número de mujeres y niños desesperados que llegan a las fronteras europeas se ha disparado. La mayoría huyen del conflicto en Siria.
ACNUR estima que unas 200.000 personas necesitan refugio en Europa. La agencia urgió a los Estados miembros a ayudar más a los refugiados y abrir nuevos centros de recepción en Italia, Grecia y Hungría.
En conferencia de prensa en Ginebra, la portavoz de ACNUR Melissa Fleming, dijo que una reforma integral de la política de asilo impediría que los traficantes de personas exploten a las personas desesperadas.
“Hay mucho miedo entre los refugiados. Sienten que han sido engañados, no saben lo que les va a pasar. Al no tener centros de procesamiento, básicamente se están entregando beneficios fáciles a los contrabandistas”, dijo la portavoz.
Mientras tanto, los líderes europeos continúan deliberando cómo ayudar a los cientos de miles de refugiados que huyen de zonas de conflicto, pero también de países vecinos donde las condiciones se han vuelto intolerables.
La presión para encontrar una solución a la crisis ha aumentado en los últimos días después de la publicación de fotos de Aylan, un niño de tres años que murió tratando de cruzar el Mediterráneo.
ACNUR asegura que el enfoque de la Unión Europea es “fragmentada” y requiere un gigantesco esfuerzo común de cara a lo que ha calificado como la mayor crisis de refugiados desde la Segunda Guerra Mundial.
Guterres dijo que si bien la historia de Aylan había emocionado a muchos, 2.600 personas han muerto este año en la misma travesía.
Aproximadamente unas 300.000 personas han conseguido llegar a Europa este año, calcula ACNUR y no parece que las cifras den señales de ir menguando.