09 de agosto, 2015 — La ONU está preocupada por la salud y el bienestar de los pueblos indígenas de todo el mundo.
En un mensaje con motivo del Día Internacional de los Pueblos Indígenas del Mundo, que se celebra hoy, el Secretario General de Naciones Unidas destacó varios desafíos que necesitan atención urgente, como la falta de vivienda y de atención médica adecuada. El índice de diabetes entre los indígenas es muy alto y muchos abusan del alcohol y las drogas.
Además, muchas indígenas embarazadas no reciben cuidados prenatales. Otro problema es la violencia doméstica. Ban Ki-moon señaló que las tasas de suicidio entre los jóvenes y la mortalidad infantil se están disparando de manera alarmante.
El Titular de la ONU pidió que estos problemas sean abordados con urgencia en la nueva agenda global de desarrollo sostenible, pero destacó que es necesario que se haga de la manera culturalmente más apropiada.
Para un futuro más justo, Ban recordó que los indígenas no pueden ser olvidados, por eso apeló a la comunidad internacional a contribuir a mejorar la salud de estas comunidades.
El Fondo Internacional para el Desarrollo Agrícola (FIDA) destacó que en los últimos años varios alimentos típicos de las comunidades indígenas se han vuelto muy populares, como la quinoa.
Sin embargo, en todo el mundo la malnutrición es uno de los principales problemas de salud que afectan a los indígenas. En América Latina, por ejemplo, la tasa de desnutrición entre los niños indígenas es dos veces mayor que el índice promedio de la población.
El FIDA calcula que con el aumento de la demanda internacional de productos como la quinoa, las reservas de las comunidades indígenas disminuirán. En 2007, la Asamblea General adoptó la Declaración sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas, que establece su derecho a recibir servicios sociales y de salud.