¡Bromas para olvidar la tragedia!

Columna Política «REPERCUSIONES», Por Samuel Maldonado B.- No cabe duda que la pérdida del poder agudiza la intolerancia y o la desvergüenza, lo que parece sucederle a muchos que han pasado por posiciones importantes y que ahora, para sentir que todavía existen o de perdis para saber que todavía algunos “los pelan”, cuando se comentan sus memorias se sienten recreados y más cuando tienen alguna  entrevistan en algunos medios de comunicación o, de pérdis, cuando a través de sus tuiters, los menos los leen para saber un poco de su poco ingenio trasnochado.

Para dar un ejemplo de las capacidades histriónicas de estos ejemplares hombres leidos que nos hacen reír cuando utilizando los medios electrónicos chatean o tuitean, leemos el publicado recientemente twitter, cuyo autor intelectual lo es  el hijo desobediente que dice: Se me hace que #el verdeleechólasal a@miselecciónmx 

Sin poder apreciar si él fue el que llevaba la sal por su activismo en las redes sociales, pienso que éste es verdaderamente el de la mala suerte, pues recordemos que de pasadita vino a Michoacán, acompañó de rapidito a su hermana y le hizo perder.

Ciertamente es él, único heredero de Salinas Hidalgo “que (&#!ç]**’&) a su máuser el que deje algo”, y no se da cuenta que a donde va no lo pelan ni quienes colaboraron con su desgobierno, pues sépase  que varios de éstos, en las elecciones pasadas, se fueron a partidos opuestos en el que  milita y en el que su compañera quiere ser la  mera mera.

Cabe señalar que recientemente, este deslustrado paisano aficionado al futbol y mucho más a las cheves (o tal vez sea al revés), como una consecuencia seguramente de  lo mal que la pasó en Venezuela en  su visita a principios de año,  cuando asistió  a respaldar  a Leopoldo López, líder opositor al régimen venezolano, escribiría en los medios electrónicos otro magno mensaje, relacionado también con el futbol: transcribo puntualmente: “que, pena, que juego tan sucio del equipo de Venezuela. Parecía que por la violencia de los jugadores venezolanos habían sido entrenados por el presidente Nicolás Maduro”.

En su visita a Venezuela a principios del año, Felipón recibiría un coscorrón del Presidente. “Sepan los pueblos de México, Colombia y Chile, dijo Maduro, que a estos tres ex presidentes les están pagando con dinero del narcotráfico y vienen a apoyar un golpe de estado”

El hermano incomodo, aquel que siendo director general de Banobras se hiciera de un auto préstamo millonario para compra de una “casita blanca”, repudiado no solamente en Michoacán sino en gran parte de México, había estado en Venezuela  acompañado de otros dos finos lebreles que conforman, los tres, tres tristes mosqueteros defensores y dignos representantes de esa derecha que por sistema apoya incondicionalmente al imperialismo económico aun cuando esos intereses vayan contra los propios de sus respectivos países. Tal vez de lo anterior, venga la afición de mi paisano por el uso del Twitter.

Ya un poco en serio, que lamentable es que los últimos titulares del Poder Ejecutivo Federal y muchos de sus principales auxiliares no mantengan una conducta discreta y, por el contrario,  sea lastimera. Los puestos públicos sabemos que son pasajeros y los que ayer fuimos sencillamente ya no lo somos.

Apoyado por un pillo cuyo, nombre está pelón decirlo, se robó la Presidencia de la República y así, Felipillo, para desgracia del país, entre copa y copa para acabar con las penas, fue titular de la más alta posición a la que un mexicano pudiera aterrizar. En fin, no siempre los más ilustres ciudadanos son los que debieran llegar a la cúspide y ser entronizados como presidentes de este, ahora, atribulado país.

México pues, esta lleno de vivales, como aquel que tenía un hermano incomodo al que a su vez, lo encerraron en un penal supuestamente de “alta seguridad” del que  se escapó el Chapo Guzmán sin que los guardias y celadores se dieran cuenta de su desaparición y  escapatoria como si hubiera sido gran mago.

Ejemplos de éstos son los hermanos Salinas, pues uno estuvo autoexiliado en Irlanda, otro pasó buena “temporada”  en un reclusorio de alta seguridad, otros de la misma sangre asesinados o suicidados… siempre dando la mala nota. Otro de los “precisos” fue a parar a la Colina llamada del perro; uno de sus secretarios se construyó un Partenón en Guerrero y si mal no recuerdo, también paro en la cárcel. Así pues, el hijo desobediente, que  tanto quiso ayudar a su hermana la llevo a perder-.

Ha pa vergüenzas nacionales!