Por Manuel Lozada.- Ya lo hemos señalado con anterioridad: el único compromiso de Salvador Jara, gobernador sustituto de Michoacán, es con el que lo puso como mandatario del Estado, es decir, con el ex Comisionado de Seguridad Alfredo Castillo.
Y como su compromiso no es con los ciudadanos, entonces le importa muy poco lo que le suceda a la gente y por eso, después de muchas horas de estar luchando contra la lluvia, el desbordamiento de los ríos y del deterioro de su patrimonio, el «gobernador» se dignó a hacer presencia en una sola colonia de Morelia, la Carlos Salazar, a pesar de que fueron docenas de colonias las afectadas por las intensas lluvias del viernes, sábado y domingo. Y se apareció hasta el domingo, un ratito y demasiado tarde. No se mojó ni los zapatos.
En el interior del Estado, ni sus luces. No sea que vaya a resfriarse.
Es decir, le vale ma…, a Salvador Jara, lo que le pase a sus gobernados.