(15-03-13) Van para tres semanas en que Fausto Vallejo se retiró para atender su salud, el precio del retiro temporal del titular del ejecutivo estatal es sumamente caro: una verdadera lucha por el mando y poder se ha desatado internamente, pues Jesús Reyna está a cargo y todos ahí sienten tener capacidades y derechos para ejercer la titularidad, cosa que solamente causa pánico político, más del que ya hay a causa de la inseguridad, cierre de empresas, falta de empleos, salarios indignos.
Realmente se ha armado la tan célebre «cámara húngara» como se dice en el argot futbolístico cuando hay pleitos tumultuarios en el terreno de juego; aquí, el pleito es en el interior de oficinas y despachos, con la única finalidad de sacar tajada, mandar y desbancar a quien se pueda, al fin y al cabo, los «faustistas» están en este momento desprotegidos, momento idóneo para «cobrar facturas» a elementos que durante un tiempo estuvieron «bendecidos, protegidos, apapachados» por Don Fasuto, ahora convaleciente.
La sorna de política resultante en estos días, es ridícula y hasta graciosa, ahora si, se están cobrando duro las zancadillas interpuestas anteriormente.
Vaya lío ha de tener en manos Jesús Reyna, pleitos al por mayor, agarrones y desgreñones a más no dar, señal inequívoca que desde un principio ni orden ni respeto hubo en el interior de su gabinete, y como lo vemos…ni lo habrá.