Morelia, Mich., 14 de febrero del 2013.- El Gobernador Fausto Vallejo Figueroa declaró durante su Primer Informe de Gobierno que «es digno y meritorio que el nombre de Vasco de Quiroga sea colocado en el muro de honor de michoacanos ilustres en el Congreso del Estado de Michoacán, ya que su trabajo con los indígenas y la formación del colegio de San Nicolas, han dado renombre al estado » .
El Gobernador Fasuto Vallejo Figueroa con esta sugerencia atenta contra la dignidad política y los próceres liberales que forjaron la historia poítica de Michoacán, pues Vasco de Quiroga no es nativo de Michoacán, llegó con las órdenes religiosas que «domesticaron» a los nativos de Michoacán, imponiendo con violencia la fe católica, rompiendo voluntades, asesinando a quienes se interponían a sus intereses, casi lograron erradicar las anitguas tradiciones y sabidurías ancestrales que, afortunadamente se lograron salvaguardar y se siguen ejerciendo en la actualidad a pesar de todo.
El pueblo pur´hembe en su pura escencia, eran artistas plásticos consumados, alfareros, carpinteros, grandes ingenieros y arquitectos, respetuosos de la naturaleza y conservdores de la misma con sus recursos, conocedores de los más grandes secretos del cosmos, cuerpo humano así como de la medicina que hasta ahora se está teniendo como «nueva tecnología».
Vasco de Quiroga simplemente vino a ser un literal domesticador que enseñó costumbres y religión de los invasores; las enseñanzas traidas de Europa, quedaban cortas a las que tenían los nativos de este territorio, totalmente humanistas con un alto sentido de respeto a la vida, una cosmogonía de amplio aspecto en la que interactuaban cotidianamente.
El hecho de enseñar los oficios europeos, asi como el formar el Colegio de San Nicolás, simplemente fueron parte elemental para tratar de borrar todo vestigio ancestral e imponer ideas propias del pseudoconquistador. Seguramente los dirigentes de las diversas etnias michoacanas tendrán mucho que decir al respecto.Ahora bien, si es tanto su arraigo a este estado michoacano por parte de Fauto Vallejo, fuera mejor, en vez de proponer a Vasco de Quiroga para estar en el muro de hombres ilustres michoacanos, sería más grato, loable y bien visto, inscribir en ese muro nombres de nativos michoacanos, la historia ´verídica de Michoacán contiene muchos ilustres nativos de estas tierras.
Por tanto, el pago al clero para ejercer aún más el poder, dominando también el área política, queda de manifiesto con el cálido saludo que brindó Vallejo Figueroa al Arzobispo Suárez Inda al dar inicio su informe, literalmente, esto se toma, no como una supuesta sana conviviencia, sino como un pago de favores a la iglesia católica.