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Michoacán de nuevo…

Por Víctor Ardura.-

(24-10-12) Veinte personas ingresaron ayer en las oficinas de Michoacán en la Ciudad de México. Torneo de quienes se introdujeron en dicho recinto, son más abiertos de lengua  civil, que de lengua autóctona.
La condición que se le da a la oficina, no es más que un pasadizo de pregón público. Hoy dos oficinistas, incluyendo la legal, hablaron a los responsables de manera oficial. Y hasta la fecha no ha sucedido nada. Ayer fue avisado del asunto el gobernador Fausto Vallejo Figueroa.
Vallejo Figueroa solicitó, a manera de demanda, protección para el lugar a Marcelo Ebrard y cumpla con su parte correspondiente en materia de seguridad ante los actos, dice él, cobardes.
Pero hubo otras representaciones mucho más aparentes. Julio Hernández, vocero del gobierno de Michoacán, dijo que la entidad pedirá que los muchachos encapuchados sean llevados a juicio. Para tal efecto pidió que se deba estar alerta con el proceso y resolución de los juicios.
Quien analice en profundidad la prensa nacional, se dará cuenta de que hubo un fugaz adjetivo por parte del julio Hernández. En el programa de la segunda edición de noticias en MVS, de Luis Cárdenas, ya daba cuenta sobre ese estado de cosas, cuando el señor entrevistado todavía le encaja más puntos de vista, dos de los cuales se referían a los hechos de violencia contra una empresa que medita sobre los discursos nacionales.
El acceso de los muchachos a las oficinas de representación de Michoacán en el Distrito Federal, que generó este embrollo, son motivo de demanda de gobierno a gobierno, y se transforma en un grito desesperado de un gobierno que defiende presuntamente a los ciudadanos afectados por las estrategias de demanda de otros ciudadanos.
Es decir, siempre habrá consenso en este tipo de cosas. Veremos.

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