El partido Acción Nacional, sus legisladores, acaban de presentar una iniciativa aparentemente novedosa en estos tiempos. Con el pretexto de que son demasiados diputados y senadores, y los costos que tienen al erario público, presentaron una iniciativa a la Constitución en la que se pretende suprimir el fuero a las dos figuras legislativas, así como eliminar la representación proporcional en las dos Cámaras del congreso.
No es un proyecto inesperado, a nadie nos sorprende. Con todo y que de menos el PAN ha dado muestras de querer que el sistema político sea menos numeroso, menos costoso, asoma la sospecha de dicha iniciativa ahora que no son mayoría y no se encontraran en el poder ejecutivo. Lo que genera una consecuencia deductiva: buscan, persiguen a legisladores con mayor poder de representación.
En términos objetivos la propuesta no es mala. En el tiempo en que se accedió a incrementar la representación legislativa, se abrió la posibilidad a distintas vías de representación. Posteriormente, tanto en la cámara de diputados como de senadores, el número de representantes y la forma en que se eligen ha rebasado los limites de la necesidad. Pero eliminarla ahora significaría generar conflicto, o de menos, polémica al interior del gremio.
Con todo, lo realmente obsoleto es el intento de presentar esta iniciativa cuando hay proyectos que merecen mayor atención y concurrencia. Bien haría Acción Nacional en ocupar intelecto, justificaciones y fuerzas para mejores proyectos legislativos ante una realidad que lo exige.