Buenos Aires, Argentina, 13-agosto del 2012 (NCT).- Muchos fumadores, especialmente las mujeres, no se animan a dejar el hábito por miedo a engordar, pese a que los riesgos para la salud del tabaquismo exceden con mucho a los de un ligero sobrepeso. Así lo han advertido especialistas en salud en el Congreso Tabaco o Salud que acogió Buenos Aires la pasada semana.
Los expertos reunidos en el encuentro estimaron que las mujeres engordan entre dos y siete kilos después de dejar de fumar, pero insistieron en que hay formas eficaces de controlar el peso, si se siguen unas pautas adecuadas de alimentación y se combinan con una mayor actividad física.
No conviene, sin embargo, recurrir a una dieta excesivamente severa, pues ello podría llevar a una recaída en el cigarrillo. Lo más conveniente es aplicar las reglas básicas que suelen dar los especialistas para combatir el sobrepeso: comer más frutas y verduras y respetar las cuatro comidas al día. Otro consejo sencillo y eficaz es beber un vaso de agua para calmar las ganas de fumar. Y puede ser muy útil recurrir a un nutricionista.
Por otra parte, el aumento de peso suele producirse al comienzo del proceso; es decir, una mujer que deje de fumar y suba dos kilos el primer mes, no tiene por qué seguir engordando los meses siguientes.
Cada vez más fumadoras
Según los expertos, una joven de 30 años que deje de fumar hoy ganará unos diez años de esperanza de vida. En Argentina, el 22% de las mujeres son consumidoras habituales de tabaco. En España, las últimas encuestas señalaban que una de cada tres adolescentes fuma. Por primera vez, las chicas fuman más que los chicos.
«La mujer cada vez fuma más. Cada día mueren en el mundo 2.700 mujeres a causa del tabaquismo, muertes que podrían ser perfectamente evitables», afirma el presidente de la Asociación Argentina de Tabacología, Daniel Buljubasich en una entrevista al diario ‘Página 12’. Un informe presentado en este congreso concluye que en el año 2.000 murieron en el mundo un millón de mujeres por enfermedades relacionadas al tabaquismo.
Además del cáncer de pulmón, que sigue siendo la enfermedad más común asociada al cigarrillo en ambos sexos, el tabaco puede llevar a las mujeres a desarrollar enfermedades como los tumores de mama y cuello uterino. También puede acelerar la aparición de la menopausia y reducir la fertilidad, así como provocar partos prematuros.
Pero, ¿es cierto que fumar adelgaza o es apenas un mito? Los expertos reunidos en Buenos Aires concluyen que algo hay de cierto: la nicotina suprime el apetito e incrementa la tasa de metabolismo en reposo.