Por Víctor Ardura.-
En la agencia Cuadratin se informa la versiòn, el enojo, del alcalde de este municipio Salvador Peña Ramírez. La interpretación de este funcionario da cierto aire de inocencia a los policias detenidos, y anuncia que un grupo de capaces abogados se ocupará no sólo de la defensa de los detenidos sino de la muerte de Oliver Ruìz García.
Está la versión oficial, la del ejercito, publicada en el diario Cambio. Los soldados habían recibido llamadas varias que denunciaban a miembros de la policía hidalguense quienes realizaban acciones de extorsiòn a la ciudadanía. El ejercito reaccionó y detuvo a un grupo de uniformados.
Estaban en ello cuando llegó una patrulla de la que surgió un efectivo policiaco, cortando cartucho con arma larga y además enmascarado, apuntando a la milicia. Se trataba de Oliver a quien un soldado dispara cuatro tiros dos de ellos en el torso.
El efectivo policíaco fue trasladado con vida por vía aérea, al IMSS Camelinas, donde falleció. El ejército consigno a los detenidos a la delegación de la PGR, endonde fueron arrestados por los presumibles delitos de delincuencia y extorsión.
Son dos versiones de un hecho que hay que investigar. ¿Quién tiene la razón; el presidente municipal de Ciudad Hidalgo que pone en tela de juicio al ejército y lo investiga, incluída la muerte de un comandante, o la milicia, que ofrece una versión que da al asesinato de un policía una forma oficial?.
Es preciso decir que la interpretacion castrense anota ademas que el armamento consignado no es el oficial.