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(27-07-12) Merced aparte, de que la demanda del PRI sobre Andrés Manuel López Obrador, completamente inoperante, lo cierto es que tanto el PAN como el PRD han coincidido en que lo hecho por el PRI pone en riesgo la limpieza y honestidad de las elecciones.
Particularmente lo hecho por este partido en materia de lavado de dinero y otros ilícitos, ponen en entre dicho la limpieza y hostigad de estos comicios. El día de ayer, Andrés Manuel dió a conocer otro ángulo de lo que hizo el antes llamado partido oficial, y ahora presumiblemente ganador de los comicios ante muchas acusaciones que le enderezan tanto el PRD como el PAN.
Llama la atención lo dicho por el diputado panista Ricardo García Cervantes, vicepresidente de la organización mundial Parlamentarios contra la Corrupción (Gopac, por sus siglas en inglés). Pero lo peor para la democracia fue la actitud, unilateral, del priísta Francisco Arroyo Vieyra, quien impidió en la Camara de Diputados que el perredista José Luis Jaime Correa expusiera los argumentos del caso Monex argumentando irracionalmente y anti políticamente, que el senador Jaime Correa diera una lectura pormenorizada del caso.
Habría que citar lo que dijo el senador panista: los crímenes del PRI son tan evidentes que la Secretaría de Hacienda, la Comisión Nacional Bancaria y de Valores y la propia Procuraduría General de la República deberían estar ya enterados dé todo lo que hicieron en estas elecciones, y particularmente lo que han quedado evidenciado con el ilícito de lavado de dinero. En este momento hay un panorama ominoso para el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.
